Estuvo el pasado viernes mi compadre Romu visitando a Mónica López Abellán en su programa de Radio Online Murcia, Expreso de mediodía. Aprovechó esta visita, aparte de para unir fuerzas con Miguel Tébar para dedicarme una canción de José Manuel Soto (¡bandidos!), para llevarse de la mano a nuestro querido Cherry (foto de Julia Lomo, cabeza pensante junto al propio Cherry de Juno Producciones). Grande como artista, pequeñico en estatura, el alhameño siempre se muestra escurridizo cuando se le hace mención de la cláusula de rescisión que tiene pendiente de pagar por su marcha de mi netlabel, CRLM Office.

Porque no sé cómo funcionarán otros sellos virtuales, pero en el nuestro hacemos las cosas así: los fichajes se improvisan mientras se fuma en la puerta del 12&medio entre concierto y concierto, a los artistas se les paga con aprecio y buenas palabras (no con collejas, que no os engañen estos bribones, que eso lo reservo para los que se atreven a decir en mi presencia cosas como «últimamente no me gusta la cerveza») y cuando uno encuentra una discográfica con interés por publicar una edición física de sus canciones, se le deja marchar sin problema alguno, con la única condición de que se comprometan a que, en un futuro no muy lejano, nos convidemos con pacharán (o unos calipos en su defecto).

#Fo cumplieron con el trato, gracias a Marina de Klaus & Kinski, su «representante» y culpable de mi afición a este licor de color rojizo, pero no ha habido tanta suerte con este maikel. No se lo tendré muy en cuenta, que nos dejó esta peladilla como señal.